12 cosas cotidianas y sencillas que ayudan a tener un cerebro sano

12 cosas cotidianas y sencillas que ayudan a tener un cerebro sano

Hasta hace poco, se creía que a partir de los 40 años comenzaban a morir neuronas de forma irremediable, que el cerebro se volvía vacio, rígido e incapaz de aprender, por suerte, ahora esos conceptos han cambiado.

Siguiendo ciertas recomendaciones, se pueden formar nuevas conexiones neuronales y aumentar la capacidad cognitiva y mental. Las neuronas son una de las células más resistentes del organismo, pero si no las cuidamos sí disminuyen en volumen y las conexiones entre ellas.

El cerebro es el órgano mas complejo del cuerpo, pesa casi 1, 5 kg y contiene más de 100 mil millones de neuronas distribuidas en redes muy complejas. Llega a edad madura a los 30 años y a partir de ahí empieza a envejecer.

Para retrasar este envejecimiento podemos seguir 12 consejos que nos ayudan a posponer la llegada de enfermedades como el Alzheimer, Parkinson u otros tipos de demencia.

CONSEJOS PARA UN CEREBRO SANO:

1.    Comer menos y mejor: una ingesta superior a la que necesitamos aumenta el estrés oxidativo del organismo, esto agrede a las proteínas, al ADN y al cerebro. La comida es la energía que ingresa a nuestro organismo, mientras de mejor calidad sea, mejor energía vamos a tener. Alimentos como el brócoli, el pescado y los frutos secos potencian la sinapsis (conexión entre las neuronas) y la reparación neuronal.

2.    Actividad física de forma regular: al practicar deporte aeróbico de forma continuada y regular, segregamos sustancias que repercuten en la mayor plasticidad o regeneración cerebral. Lo ideal es practicar al menos 150 minutos distribuidos durante la semana.

3.    Ejercicio mental: debemos estimular la mente con retos, por ejemplo, aprender un idioma nuevo, canciones, poemas, cálculos mentales, entre otros. Es útil y provoca la admiración de los demás, lo que motiva a seguir avanzando.

4.    Viajar y conocer nuevos lugares: Adquirir percepciones y memorias nuevas, la rutina es nefasta para el cerero, además viajar acumula emociones y mejora nuestro ánimo.

5.    Evitar la soledad: vivir acompañado, tener relaciones buenas y constantes con los demás, quienes viven en pareja y tienen amigos se adaptan mejor a los cambios. Sociabilizar es clave.

6.    Adaptarse a los cambios: asumir que todo cambia, no aferrarnos a nada ni a nadie, no aislarnos. Evitar decir: “Yo soy muy mayor para esto” nos estresa emocionalmente.

7.    Evitar el estrés crónico: tiene muchas consecuencias dañinas para el cuerpo y el cerebro, libera continuamente hormonas de estrés y glucocorticoides que afectan al cerebro. Lo mejor para contrarrestar el estrés es practicar deporte. Es importante tener un pensamiento práctico para solucionar los conflictos de una manera más simple.

8.    No fumar: este hábito genera pequeños infartos cerebrales y declina las funciones mentales. La nicotina produce una reducción de la memoria, la atrofia y provoca muerte de las neuronas, además aumenta el estrés oxidativo del cerebro y acelera el envejecimiento.

9.    Dormir bien: despertarse con la sensación de haber tenido un sueño reparador, para que nuestro cerebro pueda borrar aquella información innecesaria y reforzar los conocimientos aprendidos. También repara tejidos dañados.

10.    Mantenerse motivados: la ilusión, la emoción, es lo que nos empuja a tener ganas de vivir. El pensar positivo aumenta nuestras defensas y reduce la aparición de enfermedades crónicas y degenerativas.

11.    Agradecer: es uno de los gestos humanos más bellos, une a quien agradece y a quien lo recibe. La adultez es un tiempo sano de agradecer, de dar y crear nuevos lazos. Dejar atrás antiguos lastres que eran causal de tensiones y angustias. La ira, el rencor y los celos nos enferman y deterioran nuestra función mental.

12.    Las pequeñas cosas: estar sanos es un privilegio, disfrutemos de lo que nos rodea, la naturaleza, la familia, los amigos. Vivir el presente y el pasado suele deprimir y el futuro suele angustiar. Concentrémonos en el ahora que es lo único que depende de nosotros mismos.

Cada día es una nueva oportunidad para empezar a cuidar y tomar conciencia de la importancia de cuidar nuestro cerebro, nuestra mente y nuestra memoria

Fuente: vital.rpp