¿Cómo ocupar el tiempo libre de un enfermo de Alzheimer?
¿Qué es un día para alguien que padece la enfermedad de Alzheimer?. Una sensación de olvidos, una serie de fracasos en las actividades que intenta realizar con la convicción de que no conseguirá hacerlo.
Estrés, frustación, sensación de ser menos que nadie porque uno ya no es capaz de "hacer las cosas" más simples. No es de extrañar que una persona afectada de Alzheimer comience el día con miedo a estar desocupada, a sentirse incapaz y con el sentimiento de que sus fracasos lleguen a ser una costumbre cotidiana.
¿Quién, en estas condiciones, encontrará agradable levantarse, moverse o realizar actividades?. ¿Qué cuidador no se ha preguntado "Pero, ¿qué voy a proponer para hacer hoy?.
Existen actividades que necesitan mucho tiempo: lavarse, vestirse, comer, ir al servicio. Pero no cubrem la totalidad del día. Hay ratos libres. ¿Qué hacer?. ¿Qué actividades escoger y proponer?. ¿Cómo lograr que sean aceptadas?. ¿Por qué es mejor estimular a la persona a participar en estas actividades en vez de dejarla tranquilamente en su sofá?.
Es el cuidador el que va a seleccionar las actividades, quien va a proponerlas, y quien va a acompañar al enfermo.
Hay que evitar varios errores para que las actividades salgan bien. La mayoría son muy sencillas, pero la correcta realización de la actividad no es el objetivo principal. La participación de la persona afectada es primordial, así como el hecho de3 que tenga la sensación de poder realizar cosas, bien o mal. De esto, sólo será consciente el cuidador.
Las actividades encierran muchas ventajas:
Unas son actividades físicas, como por ejemplo andar, que permite que el enfermo utilice sus fuerzas.
Otras son psicológicas: él o ella se siente reintegrado/a en la vida de todos los días, encontrando una justificación a su existencia.
También existen ventajas sociales desde el momento en que la persona afectada forma parte de una actividad de grupo.
El objetivo esencial de estas actividades es devolver a la persona enferma la sensación de vivir una vida normal, estando en casa o en una residencia.
Es necesario comprender que la enfermedad de Alzheimer afecta progresivamente a las facultades mentales. Por eso, el enfermo conserva durante largo tiempo las capacidades mentales o físicas potenciales de las que puede sacar provecho. Hay que actuar sobre ellas para ofrecerle una vida lo más parecida a la vida normal.
¿Por qué es importante la realización de actividades?
Durante toda nuestra vida realizamos actividades, ya sean físicas, sociales o profesionales. La desaparición de actividades puede crear sentimiento de vacío, de inutilidad.
Si esta situación crea problemas de adaptación habitualmente, forzosamente será vivida de peor manera por una persona enferma de Alzheimer.- Será consciente de su incapacidad progresiva para mantenerse activa.
Las actividades son beneficiosas para:
- Mantener la capacidad funcional, es decir, física de la persona afectada.
- Evitar el aburrimiento y el aislamiento progresivo.
- Disminuir la dependecia.
- Devolver la autoestima.
- Minimizar las consecuencias de la enfermedad y dar a la persona enferma la posibilidad de utilizar su potencial al máximo.
Las tres grandes reglas del cuidador en relación a las actividades
Para que las actividades respondan a los objetivos descritos anteriormente, es necesario que el cuidador tengra presente 3 grandes reglas:
Regla 1: Las actividades propuestas deben poner en juego las facultades mentales y físicas que el enfermo todavía posee.
Regla 2: El cuidador no debe realizar la actividad en el lugar de la persona, sino con ella.
Regla 3: Siempre hay que dejar a una persona que participa en una actividad el tiempo que necesite.
¿A qué criterios deben responder las actividades?
Las actividades cotidianas deben responder a las siguientes características:
- Ser adultas en el enfoque y la presentación.
El enfermo puede comportarse como un niño, sin embargo, es adulto, a pesar de su discapacidad. Incluso los juegos deben ser de adultos para aumentar la autoestima.
- Ser concretas y de uso identificable.
Las actividades responden a un objetivo. !Siempre!.
- Estar cuidadosamente seleccionadas para no enfrentar a la persona con su discapacidad.
Es negativo pedirle que haga lo que ya no puede hacer. Se de cuenta de su incapacidad, lo que puede provocar reacciones agresivas.
- Estar centradas en las actividades y los movimientos familiares.
La persona afectada no está capacitada para adquirir nuevos aprendizajes. Hay que utilizar sus conocimientos anteriores y favorecer el uso de los mismos.
- Ser de fácil realización.
Es más fácil pelar patatas que colocar los cubiertos en un cajón separando cuchillos, tenedores y cucharas. Es más fácil disponer galletas en un plato que elegir entre varios paquetes cerrados.
Algunos trucos para tener éxito
- Divide la actividad en pequeñas secuencias, dando las instrucciones de manera clara para cada una de elllas.
- Empiece la actividad en el punto en el que la persona enfermapuede llevarla a cabo con éxito.
- No dude en empezar la actividad usted mismo para enseñar bienm lo que tiene que hacer la persona a quién se la propone.
- Preparar por adelantado el material que se necesita para tenerlo a mano.
- Disminuir las posibilidades de abstracción.
- Ofrece posibilidades de elección accesibles y retransmisibles.
- Escoge actividades que son conocidas por la persona enferma y que han sido para ella satisfactorias.
- No juzgue la realización, juzgue la participación.
- Siempre anímela y felicítela.
- Deje siempre el tiempo necesario.
¡RECUERDE!
- Elegir actividades de corta duración y simples. No las complique. Su eficacia está en su simplicidad.
- Organizarse para que una actividad dure de 20 a 30 minutos, no más. Después, la atención de la persona enferma desaparece y no habrá logrado nada.
- Darse cuenta cuando la actividad ya no le interesa a la persona. No insista. Pase a otra cosa.
- Mantener las actividades a nivel adulto, así como las materiales que va a utilizar para realizarlas.
- Intentar construir una rutina, en torno a una actividad que le agrade. La actividad se desarrollará siempre de la misma manera, a la misma velocidad, con el mismo objetivo e, incluso, a la misma hora del día.
- Dar muestras de flexibilidad y creatividad tanto en la forma de proponer actividades como de enfocarlas.
El paseo
El paseo, o caminar, es una de las actividades más interesantes y presenta pocos peligros.
- El paseo tranquiliza al enfermo.
- El paseo se prepara para no estropearlo por problemas que se pueden resolver antes de salir.
- La rutina en el horario (la tarde es más favorable), y en el itinerario es positiva.
- El paseo proporciona ocasiones de estímulos sensoriales.
- El paseo debe adaptarse al ritmo de la persona afectada.
Las Actividades domésticas
- Las tareas del hogar, realizadas durante mucho tiempo y apoyadas en una rutina cotidiana, son para las personas enfermas de Alzheimer una gran fuente de alegría. Llevar a cabo este tipo de actividades permite un aumento de la autoestima.
- Finalmente, la cocina ES UN LUGAR DE CONVIVENCIA DONDE MUCHAS FAMILIAS HAN VIVIDO Y COMIDO JUNTAS DURANTE TODA LA VIDA.
- Las actividades culinarias son dinámicas, estimulan la vista, el olfato, el sabor, etc...
- Prepare de antemano todos los utensilios que se necesiten.
- Permanezca a su lado hasta que finalice.
- Dígale lo que tiene que hacer y, si fuese necesario, enséñele.
- Juzgue la participación, no la ejecución.
- Muéstrele el resultado final, felicitándole a la vez.
- Verifique que ha hecho lo que dice.
- No se enfade con él si lo ha hecho mal o no lo ha hecho.
Actividades vinculadas a la profesión
- La profesión ejerce una gran influencia sobre las personas. Los enfermos de Alzheimer conservan durente mucho tiempo el recuerdo de lo que hicieron antaño.
- La actividad profesional responde a objetivos precisos. La que usted proponga, aunque más simple, también ha de responder al mismo tipo de objetivos.
- No tenga miedo de repetir la actividad de manera rutinaria. Si le gusta a la persona enferma, siempre disfrutará haciéndola.
- Al finalizar la actividad no deje el material sin colocar. Colóquelo fuera de la vista en cuanto usted sienta que su atención disminuye.
Las actividades artesanales y manualidades
- La artesanía es un tipo de actividad perfecta, utilizada muchas veces en las residencias por los terapeutas ocupacionales.
¿Qué se suele proponer?
Recortes y collages.
Modelados.
Tarjetas de felicitación.
Flores y ramos.
Costura, ganchillo y bordado.
Creación de móviles.
¡Recuerde!
Lo que cuenta es la participación, no la realización.
Dejarle el tiempo necesario para realizar la actividad.
Actividades de jardinería y horticultura
La jardinería es una actividad que tiene muchas ventajas:
- Es un elemento dinámico que tiene relación con las estaciones.
- Ocuparse de las plantas es una responsabilidad y responde a un objetivo.
- Es una actividad que se puede separar en sesiones cortas.
- Estimula los sentidos.
- Las plantas están vivas y responden a los cuidados que uno les proporciona.
- Se pueden compartir con otros miembros de la familia.
¡Recuerden!
- No hacer todo a la vez. Escoger un proyecto y fijar su atención sobre el mismo.
- Trate de conseguir que los cuidados de las plantas lleguen a ser una rutina.
- Trate de realizar las actividades poco a poco, dejando que se tome el tiempo que necesite.
- No le riña si se ensucia.
Actividades religiosas y espirituales
Con frecuencia la religión juega un papel importante en las personas de más de 65 años, que han recibido una educación religiosa desde que han nacido. Es bueno para el paciente de alzheimer que pueda seguir practicándola.
Actividades para las que no se necesita compañía
- Tienen la enorme ventaja de dejar al cuidador principal tiempo para descansar o dedicarse a otra cosa.
¿Qué proponer?
- La lectura.
- La televisión.
- La clasificación de objetos.
- El devanado.
- Partir frutos secos.
- Juegos solitarios
- Elegir juegos cuyas imágenes sean realistas.
- Recuerde que su nivel de atención es limitado.
- Empiece el juego en lugar del paciente.
¡Recuerde!
- Elegir un lugar seguro donde no se necesite vigilancia.
- Elegir una actividad bien conocida por la persona afectada y que le guste.
- Cortar la actividad cuando aparezca cansancio.
- Los juegos de mesa
Para jugar a ellos se necesitan varios jugadores. Resérvelos para las reuniones familiares o, si es posible, organice una tertulia familiar con parientes o amigos.
- No preste atención al resultado, sino a la participación.
- No proponga ningún juego nuevo, sino los que la persona ya conoce.
- La sesión de juego no debe ser demasiado larga.
La música
Las actividades que incluyen la música (cantar, tocar un instrumento, bailar al compás), tiene tres ventajas para el cuidador:
- Es fácil que se desarrollen con éxito porque las personas enfermas aprecian las canciones de su época.
- No conllevan peligro.
- Se pueden desarrollar individualmente o bien el enfermo se puede integrar en un grupo.
¡Recuerde!
- Usted se asombrará del poder la música para evocar recuerdos.
- Haga lo posible por hacer desaparecer todo lo que podría distraer a la persona de la actividad.
- Hay cierta música que hará llorar a la persona o que le provocará tristeza por el recuerdo de su juventud y de las cosas agradables que ha vivido.
El recuerdo del pasado
En el transcurso de la enfermedad, es la memoria de hechos recientes la que desaparece primero. La memoria de los hechos lejanos se queda intacta al principio de la enfermedad e incluso mucho tiempo después durante su evolución.
- Ser claro y hacerle preguntas cortas.
- Darle pistas o indicaciones para que pueda recordar fácilmente.
- Déjele tomarse el tiempo que sea necesario y que responda tranquilamente.
- Ayúdele a recordar. No incitarle a vivir en el pasado.
- Sepa terminar la sesión cuando demuestre cansancio o despiste.
La orientación en el tiempo y en el espacio.
Una de las primeras dificultades de la enfermedad de Alzheimer, debido a la pérdida de memoria, es la deorientación en el tiempo y el espacio.
- El enfermo pierde progresivamente la noción del día de la semana, la noción del mes, o de la estación.
- Tiene dificultades para leer la hora.
- También pierde la noción del día y la noche.
¿Cómo proceder para situarse en el tiempo?.
- Todos los días escriba la fecha en una pizarra, con la ayuda del enfermo. Este procedimiento es válido para el mes, la estación y el año.
¿Cómo proceder para situarse en el espacio?.
- Es recomendable que las diferentes habitaciones donde él o ella se mueva tengan una señalización que le permita entender para que se utilizan.
Realice estos ejercicios con regularidad todos los días.
- Recuérdele a lo largo del día qué fecha es.
- Déle pistas para que lo pueda recordar más fácilmente.
- Déjele tiempo para reflexionar y responder.
- Ejercicio físico y movientos
- La función motriz primaria persiste durante mucho tiempo en las personas afectadas por Alzheimer. - Los ejercicios físicos y los movimientos son esenciales para mantener el mayor tiempo posible esas capacidades físicas. Favorecen el apetito, son buenos para la respiración y el corazón...
Es indispensable que usted encuentre el tipo de ejercicio y los movimientos que mejor se adaptan a las capacidades físicas y mentales de la persona que cuida. Es usted quien mejor la conoce.
No tenga miedo de que se convierta en una rutina: los mismos ejercicios a la misma hora, en el mismo sitio.
Póngase como ejemplo para los movimientos y juegos.
No forzar nunca a hacer algo que la persona rechaza.
Actividades intergeneracionales
Es normal que las pesona de más de 65 años sean abuelos. Por lo tanto, tendrán contacto con sus nietos; será una gran satisfacción visitarles o ser visitados por ellos.
- A los niños hay que explicarles la situación y el estado en que se encuentra uno de sus abuelos. La ausencia de explicaciones puede conducir a los niños y adolescentes a un rechazo a la persona enferma a la que, sobre todo, no desean parecerse.
- A veces, la persona enferma, puede agobiar al niño con su atención y ternura.
- Si el niño no vive con la persona, sus visitas no deben ser muy largas. Los niños, sobre todo los pequeños, hacen ruido, alborotan, lloran, lo que puede ser bastante molesto para la persona afectada.
Los animales de compañía
Si ya tienen un perro, un gato o cualquier otro animal de compañía en casa, no es necesario plantearse si hay que conservarlo o no.
La presencia del animal ofrece diversas ventajas:
- Estímulo sensorial.
- Estímulo para la socialización.
- Enfoque sentimental.